En Mi Solar

Blog de Solar Arts & Crafts. Enamórate, junto a nosotros, de la biodiversidad, la sostenibilidad y los buenos hábitos.

¿Cómo planear tus metas y lograr tus objetivos?

Tradicionalmente nos fijamos objetivos al iniciar el año, pero, a medida que éste avanza, pocos los mantenemos y, aún menos, los cumplimos.

¿Te has preguntado por qué nos ponemos metas, pero no las alcanzamos? ¿Te ha pasado que haces una lista larga de cosas por hacer, haces y haces, sientes que el tiempo no te alcanza, te agotas, te abrumas, y que, a pesar de que vives con ocupaciones no ves los resultados que quieres? Si no es tu caso, ¡te felicito! Vas un paso, o varios, adelante. Si sí lo es, no estás sol@, a nosotros también nos ha pasado y, por eso, queremos compartir algo de lo que hemos aprendido.

¿Por qué nos pasa esto?

Algunas razones son:
-NO NOS PONEMOS METAS REALISTAS.

Queremos abarcar más de lo que podemos. No reconocemos nuestras limitaciones, las de los demás o no tenemos una perspectiva clara del tiempo que algo realmente nos va a tomar. a veces también nos cuesta delegar.

-Perdemos la motivación en alguna parte del camino

Tal vez no era algo que realmente queríamos o el por qué no era lo suficientemente fuerte, o simplemente es no lo planeamos bien y no va saliendo como queremos.

-No tenemos claro lo que queremos.

Como te mencionábamos antes, a veces nos llenamos de una lista enorme de cosas por hacer pero es una lista sin rumbo, que no está alineada con lo que realmente queremos.

-No elaboramos un plan de trabajo.

Vamos haciendo sin orden, sin secuencia y no sabemos de dónde venimos ni para dónde vamos. Esto nos puede generar estrés, pues no vemos cuál es el camino a seguir.

-No priorizamos

No establecemos cuáles son las actividades o metas que realmente nos importan. Nos distraemos haciendo mil cosas a la vez, drenando nuestra energía y sin conectar con los propósitos importantes.

Bueno y entonces ¿qué es planear?

Planear, de manera estratégica, no es lo mismo que llenar una lista de mil cosas por hacer y, así, tener nuestro día muy ocupado. Parece contraintuitivo, pero ¡estar muy ocupados no es igual a ser productivos!

Entonces, planear se trata de conectar con nuestros propósitos, priorizar según la importancia que tienen para nosotros, tener claro qué necesitamos hacer para seguirlos, y organizar, de manera realista, progresiva y medible, un plan de trabajo concreto.

En resumen, podemos preguntarnos: ¿Qué quiero hacer? ¿Qué de lo que quiero hacer es más importante para mí? ¿Lo puedo hacer? ¿Necesito ayuda? ¿Qué acciones debo llevar a cabo para lograr lo que quiero hacer? ¿Cómo y cuándo las voy a hacer?

Cómo aterrizar tus propósitos

-Haz una lluvia de ideas y luego PRIORIZA

Queremos hacer mil cosas pero, somos humanos y tenemos limitaciones. Sé realmente honesto contigo, pregúntate, habla contigo, siente.

Puedes preguntarte ¿Qué es lo que quiero y necesito? ¿La motivación viene de mí o lo hago solo por complacer a alguien más?  ¿Me va a hacer feliz? ¿Es una felicidad momentánea o duradera? ¿Vale la pena? ¿Afectaría negativamente a alguien? Incluso ¿me afectaría negativamente a mí?

Conecta contigo y elige lo que es realmente importante y beneficioso para ti, aquello que te hará feliz, aquello que es importante para el hoy pero también para el futuro.

Te recomendamos una herramienta buenísima, que se puede aplicar al trabajo y a la vida diaria. Es la matriz Eisenhower. Puedes explorarla aquí: https://asana.com/es/resources/eisenhower-matrix

O en este video:

escribe tus propósitos y luego desglósalos.

Ahora que tienes más claro hacia dónde quieres ir, después de preguntártelo, toma uno de esos objetivos y responde a la pregunta: ¿Qué  actividades puedo hacer para lograr este objetivo? Escribe una lista. Entre más puntuales sean esas actividades, más fácil nos será realizarlas.

Luego repite ese paso con las demás metas o propósitos.

-Organizar.

Una vez establezcas las actividades, organízalas:

Prioriza: ¿Por dónde debo empezar? ¿Qué es necesario hacer primero?

Ponles límite de tiempo y define cuándo las harás: qué día y a qué hora o en qué rango de tiempo. Usa un planeador (el de nosotros es muy lindo 😉 ) para llevar un control diario, semanal y/o mensual, según el tiempo que necesites para llegar a tu meta.

-Que los objetivos sean específicos.

Es decir, que sean concretos y medibles. Por ejemplo, si el objetivo es ahorrar para realizar un viaje, puedes definir cuánto necesitas ahorrar y en cuánto tiempo. De esta manera, puedes elaborar un plan de ahorro, ya sea diario, semanal o mensual. Ejemplo: todos los días voy a poner 1000 pesos en la alcancía o voy a hacer un ahorro programado de 50000 pesos mensuales en mi cuenta de ahorros.

-Revisa el por qué.

Entre más claro tengas el por qué de una meta, más claro tendrás qué tan importante es para ti y más motivación encontrarás para trabajar para alcanzarla.    

¡cuestiona el perfeccionismo!

Planee todo bien, conecté, listé, organicé, cumplí y ¡me salió mal! Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh.

¡Espera!

FRACASAR ESTÁ BIEN

Embarrarla está bien, errar está bien, equivocarse está bien.

No te des palo. Por mucho que planeemos, las cosas no siempre salen como queremos, la realidad no corresponde con nuestras expectativas. 

Lo que podemos hacer es ACEPTAR, AGRADECER Y APRENDER. Sí, sé que suena a frasecita cliché, pero, te lo digo por experiencia: si aplicas estas tres cosas, puedes vivir con mayor tranquilidad. No es fácil, pero sí se puede, con práctica, amor y paciencia.

  ¡Arriba ese ánimo para poner y alcanzar tus metas!

Anterior Entrada

Dejar una respuesta

© 2024 En Mi Solar

Tema de Anders Norén